Primera ruta del año 2015. Recorrido circular desde San Esteban de Gormaz al cerro Torrejón y Matanza. Salimos de San Esteban pasando por la Atalaya y Quintanilla de Tres Barrios, para desde allí alcanzar el cerro Torrejón, punto más alto del municipio de San Esteban (1003 msnm) y girar hacia el oeste a Matanza donde comemos en su bar social. A la tarde vuelta de nuevo a San Esteban.
Empezamos suave el año con una ruta social con comienzo y fin en San Esteban, ideal para quemar el acopio de calorias habitual de fechas navideñas; aunque bien es sabido que los de Sanbur no lo necesitamos, pues conservamos el "tipo" como buenos deportistas, recios y persistentes.
La convocatoria es el domingo 25 a las 9 de la mañana, esperamos 10 minutos, dando tiempo a los que se les han pegado las sábanas. Al final salimos 22, 10 chicos y 12 chicas, dato novedoso pues en todas las ocasiones (que recuerde) solemos ser mayoria los hombres. Que cunda el ejemplo en el futuro. Una vez más la meteorología nos es favorable: el día ha salido soleado y calmado, como ya nos tiene acostumbrados (por ahora) este invierno. Tan solo nos ha molestado algo el viento en la cumbre del Torrejón. Buena compañia y buenas viandas y ya tenemos lo ideal para un grato paseo por el campo. Bueno eso y un buen mapa para no perdernos, por no decir un sherpa.
Nos toca ejecutar el plan B, como otras veces, pues decidimos evitar en lo posible los caminos embarrados tras las nevadas de los días pasados. La idea inicial era cruzar el pueblo en dirección a la carretera de Quintanilla, incorporarnos desde allí al Camino Real y enseguida coger otro camino a la izquierda en dirección norte. En vez de eso, la ruta la iniciamos saliendo por detrás del frontón de San Esteban, tomando el sendero que cruza primero la abandonada via del tren y luego la carretera nacional en dirección este, hacia la Atalaya musulmana.
A las 9:50h ya estamos en la Atalaya, donde nos demoramos unos minutos pues es difícil evitar la tentación de subir a lo alto de la construcción para disfrutar de las vistas, cual noble castellano divisando sus dominios; minutos después continuamos por la pista que nos lleva cómodamente a Quintanilla.
Son las 10:15h cuando entramos al pueblo por el puente del río Torderón. Subimos hasta la iglesia de San Lorenzo y nos concentramos en su parte trasera, donde nos parece bien parar a almorzar sentados contra la fachada, al agradable sol de invierno (10:30h). Nos acompaña al rato Tomás Aguilera que se ofrece a hacer de "sherpa" hasta el cerro Torrejón. Vamos tras sus pasos saliendo de Quintanilla por la ancha pista a Matanza, pero enseguida giramos a la derecha por el Camino Real.
No hemos recorrido un kilómetro cuando tomamos otro camino a la izquierda que remonta el arroyo del Navazo. El camino está en buen estado pero a los 2 kilómetros termina bruscamente, al remontar una loma, en una tierra de secano. La cruzamos para vadear al otro lado un arrollo (11:40h). El grupo aquí está un poco desperdigado y esperamos hasta que se van incorporando los rezagados.
Con Tomás guiando avanzamos en suave pendiente ascendente adentrándonos en el carrascal en dirección norte. Por fin a las 11:50h llegamos el vértice geodésico del cerro Torrejón, desde donde, para deleite de la vista, se dominan en primer plano los pueblos y tierras de Matanza, Villávaro y Quintanilla con su gran extensión de monte, y en la lejanía las principales cordilleras de la ibérica al norte, con la sierra de la Demanda (picos San Millán, San Lorenzo), la de Urbión (la Muela del Urbión) y hasta Cebollera, y el sistema central al sur, con la sierra de Pela y la sierra de Ayllón un poco más al sur oeste. La nieve que cubre generosamente las lejanas montañas tiene el curioso efecto de "acercarlas", haciéndolas parecer más próximas de lo que en realidad están.
12:00h Tras la foto de grupo en "cumbre" dejamos el cerro enfilando en dirección oeste, ladera abajo entre Encinas y espesos matorrales; a nuestra derecha se ve ya cercano el pueblo de Matanza. Al poco rato despedimos a Tomás que vuelve a Quintanilla. Nos deja bien situados, pues estamos a pocos metros de tomar el camino de Carraberzosa, via pecuaria que va a dar al camino de Matanza (12:30h).
Una vez en la pista, desde la incorporación, hay unos 2 km al pueblo. Entramos en Matanza a las 12:50h. Vamos directos a la Iglesia románica de San Juan Bautista para una breve visita. La encontramos cerrada, así que nos quedamos unos instantes observando su fachada. Nos llaman la atención los canecillos que decoran el ábside y la ventana en arco de medio punto en el eje del mismo. Después volvemos buscando cobijo en el bar, donde nos "refrescamos" con unas cervezas antes de la comida. Preparamos la comida en el mismo bar, pues cuenta con buen espacio y mobiliario, además de una generosa estufa en el centro. Como siempre ocurre la gente de los pueblos nos trata de lujo. Coincidimos con varios cazadores que vuelven de la batida y como nosotros terminan la actividad socializando detrás de la barra.
Tras una comida alargada con sobremesa, nos "espabilamos" para seguir nuestro camino y completar la ruta (15:30h). ¡Lo que cuesta ponerse de nuevo en marcha después de un buen rato a la mesa! Volvemos por la pista que discurre paralela a la carretera comarcal que une Matanza con San Esteban, atravesando grandes tierras de labranza. Sin más contratiempos que el inevitable barro del camino, entramos en San Esteban a las 5 de la tarde. En total hemos caminado unos 22km (la distancia final queda un poco en entredicho, hay cierta discrepancia con los datos del gps), completando una inmejorable jornada de senderismo; un poco más exigente de lo inicialmente previsto, sirva el barro acumulado en nuestras botas para demostrarlo.
P.D. 1: Desde aquí envío, en nombre de todo el grupo, un abrazo a Jose Luis, uno de los históricos de Sanbur, que se está recuperando de un reciente accidente. Será buena señal verte pronto de nuevo pateando montes y subiendo picos junto a los demás.
P.D. 2: Como Eduardo Bas le ha cogido gustillo a esto de las caminatas con Sanbur, ha tenido a bien escribir un relato con sus impresiones de la jornada, como hizo un par de meses atrás en la ovochorizada. Lo reservo, con su permiso claro está, para la siguiente entrada, y evitando alargar demasiado la presente.
No hay comentarios :
Publicar un comentario